Saber determinar el lugar más apropiado para instalar un negocio no es tarea sencilla, se trata de una decisión estratégica.  Es fundamental  conseguir una localización óptima ya que en gran medida ésta puede favorecer o perjudicar la actividad económica presente y futura de la empresa.

A la hora de elegir la ubicación concreta del local hay que tener en cuenta la superficie, su distribución en planta, su coste, forma de adquisición (alquiler, compra, leasing), la reglamentación que puede afectarle, así como posibilidades de una futura ampliación.

Un estudio de mercado permitirá tomar una decisión lo más certera posible. Dependerá del tipo de empresa que se quiera crear el que este estudio sea más o menos exhaustivo.  De esta manera, se podrá comprobar si la idea empresarial es viable técnica y económicamente, o posibilidades de expansión en el futuro. Deberá conocer una estimación de compras y ventas, ingresos y gastos, según el mercado analizado, la población, la situación del local, la competencia, etc.